• Pruebas complementarias en la evaluación del delirium y confusión

    ANALÍTICA

    Se debe realizar una analítica, con hemograma completo, glucemia, electrolitos, creatinina y urea. Análisis de gases en sangre arterial ya que en algunos síndromes tóxicos puede haber hipo o hiperventilación. Si se sospecha insuficiencia hepática se solicitarán pruebas de función hepática y amonio. El INR es un parámetro especialmente sensible si hay fallo hepático agudo. Se solicitarán también tóxicos en orina y sedimento de orina y se realizará hemocultivo si existe fiebre o datos de infección. Otras pruebas de laboratorio que se pueden solicitar son las hormonas tiroideas, la vitamina B12 y el ácido fólico, el cortisol y las hormonas del eje hipotálamo-hipofisario.

    NEUROIMÁGEN

    En la mayor parte de los casos no es precisa la realización de pruebas de neuroimagen ya que la etiología suele ser claramente metabólica. No obstante está indicada si se sospecha patología estructural, ha habido traumatismo o la exploración neurológica es anormal. También cuando el diagnóstico es incierto. La resonancia magnética muestra restricción de la difusión en tálamo y córtex bilateralmente en la encefalopatía hepátic y  también es útil en intoxicaciones por monóxido de carbono y metanol en las que aparecen lesiones en el putámen y globo pálido. La encefalopatía de Wernicke se confirma por la existencia en la resonancia magnética cerebral de lesiones en los cuerpos mamilares, en la sustancia gris periacueductal, en los cuerpos foliculares y en el tálamo medial. El daño secundario a hipoglucemia suele ser reversible si afecta a sustancia blanca e irreversible si hay afectación cortical en la secuencia de difusión.

    ELECTROENCEFALOGRAMA

    En general, lo que se encuentra en el EEG del delirium,  es la desorganización de los ritmos cerebrales habituales y enlentecimiento generalizado. En las encefalopatías metabólicas es común encontrar ondas trifásicas o ritmo delta generalizado o de predominio frontal pero esto no es específico y puede encontrarse en otras condiciones. El EEG también es útil para detectar actividad epiléptica y para diferenciar las mioclonías corticales, de naturaleza epiléptica, de las subcorticales asociadas a encefalopatía metabólica.
    El EEG es útil para determinar la severidad del cuadro, ya que a mayor enlentecimiento mayor es el grado de delirio.


    OTRAS

    La punción lumbar está indicada si se sospecha meningitis o encefalitis o para confirmar una hemorragia subaracnoidea. También deberá realizarse si la causa del delirium es incierta.
    También se pueden realizar radiografía de tórax, electrocardiograma y ecocardiograma para descartar patología cardiopulmonar. Las pruebas de neuroimagen funcional revelan que hay alteraciones variables en la perfusión en regiones frontales y parietales.

    BIBLIOGRAFÍA
    • Fong TG, Bogardus ST Jr, Daftary A, Auerbach E, Blumenfeld H, Modur S, ET AL (2006). Cerebral perfusion changes in older delirious patients using 99mTc HMPAO SPECT. J Gerontol A Biol Sci Med Sci. Dec;61 (12):1294-9.
    • Inouye S.K. (2006) Delirium in older persons. NEJM. Vol. 354, pp.1157-1165.