• Sincinesias anormales y síndrome piramidal

        Otro de los signos que pueden describirse en el síndrome piramidal es la aparición de sincinesias anormales. Se denomina sincinesia al conjunto de movimientos accesorios que acompañan a un movimiento principal. Por ejemplo, si vamos a coger un objeto de la mesa movemos la mano y los dedos, pero también acomodamos la postura del brazo, la cabeza, el tronco e incluso las piernas para facilitar la acción, estos movimientos serían las sincinesias.

       Cuando se produce una lesión de la vía piramidal pueden aparecer determinadas sincinesias anormales, de entre las cuales vamos a destacar la sincinesia de la marcha y la sincinesia del pulgar por su frecuencia.

        La sincinesia de la marcha normal aparece al caminar y consiste en la dorsiflexión del pie y una flexión de la rodilla permitiendo que el avance de la pierna hacia delante se produzca sin dificultad. En el caso de lesión de la vía piramidal el pie se extiende y la rodilla se mantiene extendida, así la pierna al avanzar lo hace rígida con un movimiento circular de abducción y aducción (marcha en segador). Se acompañará de una postura inclinada del cuerpo hacia el lado contrario para poder desplazar la pierna extendida, si bien habitualmente la punta del pie rozará en suelo durante el desplazamiento para dar el paso.

        La sincinesia del pulgar por su parte ocurre de forma normal cuando alguien tiene que traccionar con fuerza algún objeto con los dedos flexionados, en esa situación el pulgar adoptará una leve abducción y extensión o incluso una leve flexión. En el caso de una lesión de la vía piramidal el dedo pulgar se aducirá y flexionará, quedando de esta forma pegado a la palma de la mano.