• Anatomía y fisiología de las glándulas sudoríparas

    RESUMEN: Existen dos tipos de glándulas sudoríparas: apocrinas (relacionadas con aspectos odoríferos más que sudomotres, que reciben inervación tanto adrenérgica como colinégica) y ecrinas (relacionadas con funciones termorreguladoras, inervadas por fibras simpáticas colinérgicas que estimulan la secreción del sudor).

    La función de las glándulas sudoríparas ecrinas se encuentra subyugada a la regulación de la temperatura corporal. La vía aferente parte de diversos termorreceptores (cutáneos e hipotálamicos) que emiten impulsos a través de médula y tálamo hacia el hipotálamo, centro donde se integran las señales termosensoriales. La vía eferente abandona el hipotálamo, atraviesa el tronco del encéfalo y llega hasta la columna intermediolataral medular, donde contactan con neuronas preganglionares que envían sus axones a los ganglios simpáticos laterovertebrales desde donde parten las neuronas posganglionares simpático-colinérgicas (fibras C) hacia las células mioepiteliales y acidófilas. Ante situaciones de calor el sistema termostático hipotalámico provocará un descenso de la temperatura mediante vasodilatación cutánea, y estimulación de la producción de sudor. La sudoración también tiene un componente de control emocional (sudoración emocional) regulada por córtex cingulado anterior y sistema límbico.

     

    INTRODUCCIÓN

    Los trastornos de la sudoración son manifestaciones clínicas frecuentes de procesos disautonómicos íntegramente relacionados con la regulación de la temperatura. En muchas ocasiones pasan desapercibidos al considerarse menos importantes o alarmantes que otros síntomas autonómicos. Se dividen en trastornos por exceso (hiperhidrosis) y por defecto (hipo o anhidrosis), siendo éstas las realmente alarmantes pues pueden llevar a golpes de calor o hipertermia (William et al; 2003).

    Las hiperhidrosis y anhidrosis pueden ser generalizadas o localizadas atendiendo a su localización y primarias o secundarias atendiendo a su etiología.

     

    ANATOMÍA

    Existen dos tipos de glándulas sudoríparas(GS): apocrinas (GSP) y ecrinas (GSE) (Navarro; 1992).

    - Apocrinas

    Son de tamaño grande, se localizan en zonas cutáneas de alto contenido piloso (axila, región urogenital) y están relacionadas con aspectos odoríferos más que sudomotres. Reciben una inervación tanto adrenérgica como colinégica.

    - Ecrinas

    Son formaciones tubulares con una porción glomerular secretora hipodérmica y otra ductal excretora epidérmica. Distribuidas por casi toda la superficie cutánea, predominan en palmas y plantas (zonas acras) y están relacionadas con funciones termorreguladoras. Se componen de células basófilas, acidófilas (ambas secretoras) y mioepiteliales (expulsoras). Están inervadas por fibras simpáticas colinérgicas que estimulan la secreción del sudor (hasta 3-4 litros por hora), inoloro y de contenido mayoritariamente acuoso.

    Como hemos comentado la función de las GSE se encuentra subyugada a la regulación de la temperatura corporal.

    La vía aferente parte de diversos termorreceptores (cutáneos o externos e hipotálamicos o internos) que emiten impulsos a través de médula y tálamo hacia el hipotálamo, centro donde se integran las señales termosensoriales.

    La vía eferente abandona el hipotálamo, atraviesa el tronco del encéfalo y llega hasta la columna intermediolataral medular, donde contactan con neuronas preganglionares que envían sus axones a los ganglios simpáticos laterovertebrales desde donde parten las neuronas posganglionares simpático-colinérgicas (fibras C) hacia las células mioepiteliales y acidófilas. La cara está inervada por los segmentos T1-T4, miembros superiores por T2-T8, el tronco por T4-T12 y las extremidades inferiores por T10-L2.

     

    FISIOLOGÍA

    El hipotálamo posterior integra la información proveniente de los termoceptores internos (localizados en el área hipotalámica anterior-preóptica, médula espinal, núcleos del rafe, formación reticular) y externos (localizados en la piel alcanzando el hipotálamo a través de fibras C) emitiendo una respuesta para aumentar o disminuir la temperatura corporal (Guyton; 1997). Ante situaciones de calor el sistema termostático hipotalámico utiliza tres métodos para bajar la temperatura:

    - Vasodilatación cutánea.

    - Estimulación de la producción de sudor el cual se evapora produciendo pérdida de calor.

    - Inhibición de la termogénesis química en la grasa parda (ausente en los adultos).

    Este sistema además se encuentra influenciado por otros factores como son hormonales (la progesterona aumenta la temperatura y sudoración) u osmolares (la hiperosmolaridad aumenta la sudoración).

    Además hay que tener en cuenta que la sudoración no sólo está controlada por estímulos térmicos (sudoración termorregulatoria) si no que también existe un componente de control emocional (sudoración emocional) regulada por córtex cingulado anterior y sistema límbico con mayor expresión sobre ciertas zonas cutáneas (cara, axilas, palmas y plantas) donde estimula la sudoración y produce vasoconstricción (en lugar de vasodilatación) (Schlereth et al; 2009).

     

    BIBLIOGRAFIA

    Guyton (1997). Regulación de la función gastrointestinal, ingestión de alimentos, micción y temperatura corporal. En: Guyton. Anatomía y fisiología del sistema nervioso (pp 410-430). Buenos Aires: Editorial Panamericana.

    Navarro X. (1992). Evaluación de la función sudomotora. En Navarro X. Evaluación del Sistema Nervioso Autónomo (pp 37-52). Barcelona: Prodisa.

    Oliver P, Paul E (2004) Anatomy of the sweat glands, pharmacology of botulinum toxin and distinctive síndromes associated with hyperhydrosis. Clin Dermatol;22:40-44.

    Schlereth T, Dietrich M, Birklein F (2009). Hyperhidrosis. Causes and treatment of enhanced sweating, Dtsch Artebl Int 106 (3):32-7.

    William P, Freeman R (2003). Disorders of sweating. Seminars in Neurology. Vol 23 Nº4.