Reinserción social tras un ictus
El ictus va a producir un cambio radical, no solo en el paciente, sino también en sus familiares y amigos, al principio es vivido por parte de estos como una pesada carga, se asumirán nuevas responsabilidades que afectaran a la rutina social, familiar y laboral de los que le rodean.
Es imprescindible la ayuda de estos para que el paciente supere estos desafíos tanto físicos como psicológicos.
Los pacientes con menores lesiones y mayor grado de relación medioambiental obtendrán mejores resultados.
Hay que enfatizar en que el cuidador principal asumirá una tarea dura en cuanto a su exigencia diaria y su extensión en el tiempo. Generalmente tras los primeros 6 meses se sienten fatigados, incluso con un empeoramiento en su salud. Hay que recomendar un reparto de las responsabilidades y tareas entre familiares y amigos siempre que se pueda realizar, así se contribuye a prevenir el desanimo y la fatiga.
Los problemas cotidianos
Aseo personal:
Tras el ictus con frecuencia la persona no es totalmente independiente y esto repercute en las actividades de la vida diaria. El paciente necesitará ayuda en su aseo personal.
El aseo personal y el baño deben realizarse, en el cuarto de baño adaptado según el déficit que presente para convertirlo en un lugar seguro.
“Un buen aspecto nos hace sentir mejor”
Consejos: - Instalar barandillas alrededor de la bañera y el wc.
- Colocar una alfombra en la salida de la bañera que evite las caídas.
- Poner sillas adaptadas si no puede ponerse de pie.
- Protección de resbalones dentro de la bañera.
- Comprobar la temperatura del agua.
- Secado e hidratación de la piel tras el baño.
- Usar maquinilla eléctrica para el afeitado.
- Correcta higiene bucal y dental.
Si la persona lo puede realizar de forma independiente, aunque sea con dificultad, hay que animarla, pero nunca dejarla sola.
Vestido:
Recomendaciones:
- Ordenar toda la ropa según el orden de uso.
- Comenzar por la extremidad afectada y desvestirse al revés. Mejor estar sentado.
- Uso de ropa deportiva holgada, con velcro o cintras elásticas para sujeción.
- Uso de calzadores especiales.
Alimentación:
Son frecuentes los trastornos de la deglución (uso de sonda nasogástrica, gastrostomía), dificultades en la visión, falta de atención, dificultad en la movilidad que entorpecen e influyen de forma negativa en la alimentación
Consejos:
- Platos con reborde y cubiertos con adaptaciones.
- Evitar posiciones incorrectas. Mejor sentado para evitar el reflujo.
- Modificar la consistencia de la comida: espesantes de líquidos.
- Pequeñas raciones.
- El frío estimula la deglución.
Desplazamientos:
Una de las secuelas mas importantes es el déficit motor, necesitaran desplazarse de un lugar a otro de la casa y en la calle con el uso de bastones trípodes o cuádruples, andadores, sillas de ruedas; cuando exista mayor déficit de la cama a la silla de ruedas, de esta al inodoro con un correcto uso de las transferencias.
Más vanguardista es el uso de la domótica y robótica en el domicilio con aparatos que levantan las persianas, encienden los electrodomésticos, desplazamientos automáticos para subir escaleras, etc
Conducción segura de vehículos:
Con bastante frecuencia el paciente se pregunta sobre la posibilidad de retomar la conducción de su automóvil.
El haber padecido una crisis epiléptica desaconseja la conducción y retrasa la evaluación hasta al menos un año. Los déficit que más dificultan la conducción serán la hemianopsia (que contraindica la conducción de vehículos), los déficits de atención visuespacial y la lentitud en la ejecución motora. Ante la duda sobre la capacidad de conducción se requiere una valoración por parte del neuropsicólogo. Los déficits motores precisarán adaptación del vehículo y entrenamiento en su uso.
BIBLIOGRAFIA
• González Más R. Rehabilitación Médica Barcelona. Ed Masson, S.A. 1997 cap 8: 151-174
• Guía práctica para el paciente y sus cuidadores. “Después del ictus”. Grupo de estudio de las enfermedades cerebrovasculares de la Sociedad Española de Neurologia. Barcelona 1997.
• Ramos Sanchez M,. Actividades de la vida diaria: ayudas para uso domestico, para el aseo,el vestido y el calzado. Ayudas para el cuidado de la casa. Rehabilitacion (Madr) 1999;33:380-8.
• Rehabilitación después de una Apoplejía National Institute of Neurological Disorders and Stroke (NINDS), htm. nov. 2007.
• Ruiperez Cantera I. Llorente Domingo P. Guía para Auxiliares y Cuidadores del Anciano Mc Graw-Hill/Interamericana de España, S.A.U. 1998 cap 15: 218-241
• Taylor M. ¿Qué es afasia? Consejos a los amigos y familiares del
paciente. Instituto de Medicina Física y Rehabilitación. New York.
University Medical Center.
• Zambrano LE, Restrepo R, Lugo LH. Rehabilitación en salud. En:Trastornos afásicos y rehabilitación. Zambrano LE. Seg. Ed. Medellín: Universidad de Antioquia; 1985.p 737-52.
• Sánchez Blanco, M.E Martín Fraile, M. Izquierdo Sánchez. Manual Sermef de Medicina Física y Rehabilitación, Ed panamericana, 2006. cap 40: 492-493.
- 15224 lecturas